¿CUÁLES SON LOS EFECTOS DEL FRÍO EN NUESTRA PIEL?
Algunos de los efectos del frío en nuestra piel es que causa vasoconstricción en los capilares. Esto hace que no llegue suficiente oxígeno a nuestra dermis y, por ello, la tendencia a tener una tez apagada y seca. También se produce un envejecimiento más prematuro y se retrasa la renovación celular.
La aparición de rojeces es una de las causas que produce el frío en nuestra piel. Utilizando productos como sérums específicos podemos prevenir su aparición antes de exponernos al frío.
Las pieles que son más propensas al enrojecimiento son las más claras de tez blanca, más finas y las más secas. Al ser más finas, la microcirculación se superpone a la superficie de la piel.
Los tratamientos a base de ácidos cosméticos, como es el caso del ácido glicólico, ayudarán a eliminar marcas en la piel como acné o cicatrices. Por la noche, elige una crema menos grasa para que la piel descanse y tenga un aporte extra de suavidad y no olvides usar una mascarilla al menos una vez a la semana, así como un exfoliante para reparar la piel muerta.
Mantén siempre la cara limpia con aceites, leches limpiadoras y lávala por lo menos dos veces al día utilizando limpiadores que no utilicen detergentes ni productos demasiados abrasivos.
Si tienes la piel muy sensible incluye siempre productos adaptados a ti, que no incluyan alcohol ni tampoco jabones. Si te aplicas maquillaje, trata de que contenga siempre protección solar, aunque sea poco. Parece que no pero en invierno es más que nunca cuando debemos estar protegidos del sol. Aunque no lo creas, en invierno te quemas y suelen salir manchas irreversibles.
Nuestras manos y nuestros labios sufren constantemente el frío, así que intenta ponerte crema continuadamente y utiliza cremas a base de aceites y bálsamos, que suavicen y eliminen la aparición de arrugas.
Costumbres saludables para la piel, tomar vitamina C y beber mucha agua
Una de los buenos hábitos para tu piel es aportar una buena dosis de vitamina C a la misma. Esto es beneficioso tanto para el interior como para el exterior.
Toma alimentos ricos en vitamina C, como naranjas, mandarinas, espinacas... Muchas frutas y verduras que se caracterizan por ser antioxidantes, producen colágeno en nuestra piel y retrasan el envejecimiento.
Además, beber dos litros de agua al día también es buenísima opción para mantenerse hidratado por fuera y por dentro.
Puedes optar a ponerte algún sérum que tenga vitamina C y que, además de sus muchos beneficios, reducirá mucho las manchas del sol en cualquier época del año.
NECESITAS UNA HIDRATACIÓN EXTRA EN ESTA ÉPOCA DEL AÑO
En invierno la piel se expone a condiciones muy distintas al verano y mucho más fuertes. El frío, la lluvia, la humedad, el calor, las calefacciones, otra vez el frío…y si a eso le sumas la contaminación, hace una bomba para nuestra piel.
En el caso de la sequedad y la deshidratación, la piel se altera y no es capaz de poner una barrera frente a los factores externos que puede haber. Es por ello por lo que nuestra piel necesita unos cuidados extras para seguir adelante y no verse perjudicada.
¿Cómo debemos cuidar la piel en esta época del año?
En realidad los tratamientos a usar dependerán el tipo de piel de rostro y cuerpo, además del tipo de factor externo al que esté expuesto.
Por lo general, las bajas temperaturas harán necesario que te pongas en la piel elementos emolientes y humectantes que la protejan y le den la hidratación necesaria. Si vas a exponerte al frío y zonas de sol como por ejemplo la nieve, deberás usar foto protectores o factor de protección solar alto.
¿Qué tipo de productos debemos usar en invierno?
Hoy en día son muchos los productos que tenemos en el mercado para proteger la piel y cada uno de ellos está destinado a una finalidad y da unos resultados distintos. Por ello, debes saber qué tipo de piel tienes y cuál es el tratamiento más adecuado para ti.
Desde geles de ducha que ya incorporan hidratación hasta auténticos aceites que regeneran la piel, como aceite de almendras, de coco, de albaricoque, de pasiflora, de arroz de jojoba, cremas de miel de aloe vera, etc. Un sinfín de productos que calman la piel, la suavizan y la regeneran.
Por ejemplo, los de avena o con ácidos grados omega 3 y 6, que nos aseguraran mantener nuestra piel bien hidratada y aportar los nutrientes necesarios.
En cuanto a que fórmula es que mejor se adapta a ti, varía en función de tus necesidades. En principio, a mayor sequedad deberías utilizar fórmulas más aceitosas.
Normalmente se suelen elegir lociones normales en el caso de pieles normales o secas. En el caso de los aceites, se utilizan para pieles mucho más secas aunque hoy en día los aceites hidratan sin dejar la piel grasa gracias a la rápida absorción de éstos. Ya casi todos los productos que hay en los mercados suelen ser de aceptación a todas las pieles existentes.
¿A qué zonas debemos prestar especial atención?
Principalmente, como hemos comentado antes, las zonas más sensibles y las más expuestas al frío son las manos y el rostro. Dentro de estas dos, los labios y las manos son las que más sufren de frío.
Este caso también debemos hidratar en profundidad otras zonas que, aunque no se vean, tienden a resecarse mucho con el paso del tiempo, como son los codos y rodillas.
NUESTRO CABELLO TAMBIÉN SUFRE EN INVIERNO
De la misma manera que nuestro cuerpo y rostro sufre el frío en invierno, también lo hará nuestro pelo, debido al frío y a la humedad del ambiente.
Habrás notado que el pelo en esta época del año se cae con más facilidad debido a que puede estar más graso por las temperaturas bajas, para ello, puedes aplicar un tratamiento reparador del cabello.
Los tratamientos de queratina que hidratan y protegen el cabello son algo idóneo para esta época del año. Además, te aportan suavidad, energía, brillo y luminosidad la cabello.
Como ves, son múltiples las formas que tienes para poder hacer frente al invierno y que tu piel se encuentre radiante y descansada. Lo más importante es llevar un estilo de vida saludable y, sobre todo, alimentarte correctamente, beber en abundancia y practicar ejercicio físico siempre que puedas. Recuerda protegerte del sol y tapar las zonas de tu piel que más sensibilidad tengan. No dudes en acudir a un profesional en caso de que te salgan rojeces o cualquier irritación debido al frío.
Para usar maquillajes, intenta elegir aquéllos que no contengan alcohol y productos que hidraten y protejan la piel, además de ponerte guapa.
Commentaires